El verano no solo es época de descanso. Aprovecha tus días libres para hacer brotar toda esa adrenalina que permanece en ‘stand by’ durante los meses de oficina. Toma nota de estas actividades acuáticas.
¡Salta de la toalla y ponte a remojo! Que el verano no te convierta en un ser vegetal que reposa al sol vuelta y vuelta. Tienes un sinfín de actividades, todas ellas muy refrescantes, para aplacar el calor, hacer deporte y a la vez exprimir las vacaciones al máximo. Adéntrate en un mapamundi de aventuras. Elige actividad y destino.
‘Flyboard’ para los más atrevidos
Lo último en deportes acuáticos es el ‘flyboard’. Algo así como sobrevolar el mar con unas botas mágicas. Se puso de moda hace un par de veranos, cuando se publicaron unas imágenes de Leonardo DiCaprio practicándolo en Ibiza. Desde entonces, son muchas las playas que cuentan con esta opción entre sus deportes acuáticos y muchos quienes quieren probarlo. Las botas están propulsadas por agua a presión a través de unos tubos, así consigues elevarte varios metros. Los expertos consiguen, incluso, hacer piruetas imposibles en el aire. Marmaris es un destino de la costa turca donde puedes practicarlo. Un puerto natural entre el Mediterráneo y el Egeo, con amplias alternativas náuticas con las que surcar las aguas como ‘kitesurf’, motos de agua o bananas gigantes. Y si te queda tiempo, súbete a un ferry y visita la isla griega de Rodas. La ciudad histórica Bodrum es otra alternativa a tener en cuenta. Hoy en día, resort turístico para los europeos que buscan buen clima y divertida vida nocturna.
Regatas de vela. Las más ‘reales’ en Palma
Surca las olas sin mojarte ni una gota. Hazlo a bordo de un velero como la Familia Real española. Desde el enorme Real Club Náutico de Palma de Mallorca salen cada año las embarcaciones rumbo a mar abierto para llevarse la Copa del Rey Mapfre. Este año celebra su 35ª edición con una novedad muy esperada: ‘los barcos voladores’, llamados así porque su estructura no toca el agua, sólo unas aletas a modo de patines que aligeran el peso. La velocidad y el espectáculo están asegurados en una de las regatas más importantes del Mediterráneo.

Chile, capital mundial del surf
Punta de Lobos, a seis kilómetros de Pichilemu (Chile), está plagada de acantilados rocosos de hasta 50 metros de altura. Gracias a la magnitud de sus olas ha sido nombrada reserva mundial de surf. Suelen tener una altura de entre dos y tres metros, pero dependiendo de la temporada, pueden alcanzar los diez, haciendo las delicias de los participantes de la Big Wave World Tour (BWWT). También podrás disfrutar de otras modalidades como ‘paddlesurf’, remar de pie sobre la tabla o ‘wakeboard’, el esquí acuático en el que te deslizas gracias a la tracción de una embarcación o moto de agua.

‘Windsurf’ y los vientos alisios canarios
Surgió en Estados Unidos como una modalidad del surf para evitar el cansancio de nadar hasta la ola. En España, uno de los mejores lugares para practicar esta modalidad es el archipiélago canario. Hasta allí llegan los vientos alisios que son perfectos para empujar la vela y que puedas surcar el agua sobre tu tabla con mayor facilidad. Por eso, Gran Canaria es la capital europea del ‘windsurf’ y playas como Pozo Izquierdo o Vargas, auténticas mecas para los aficionados. Y como de viento se trata, también es un lugar perfecto para el ‘kitesurf’ que usa una cometa como tracción. Las playas de Fuerteventura y Lanzarote también son destino estrella entre los amantes de estas dos modalidades.

Kayak en el Lago Malawi
Es uno de los grandes lagos del continente africano, tanto sus límites se extienden por tres países: Malawi, Mozambique y Tanzania. Descubierto por el gran explorador David Livingstone, hasta allí llegan biólogos con ansias de estudiar su ecosistema de más de 300 especies de cíclidos (peces autóctonos) y aventureros con ganas de perderse a golpe de remo. Una de las formas más apasionantes de conocer el lago es en kayak desde Cape Maclear. Sus dimensiones –580 kilómetros de largo y 40 de ancho– son tales que alberga varias islas en sus interior. Algunas como Likoma y Chizumulu, habitadas por varios miles de personas que viven de la pesca y la explotación de bananas, tapioca y mangos. Llévate tus gafas de submarinismo y podrás bucear entre sus aguas.

Buceo entre tortugas en Sipadan, Malasia
Desde la Gran Barrera de Coral (Australia) hasta el Caribe mexicano muchos son los paisajes submarinos que puedes explorar con tus gafas bajo el agua. Pero pocos como Sipadan en Malasia, una isla que se eleva 600 metros del lecho marino y en la que habitan un gran número de especies marinas. Entre ellas, las tortugas, que estarán encantadas de compartir sus aguas contigo. A unos 20 metros de profundidad se encuentra uno de los rincones para bucear más míticos de la zona. Se trata del cementerio de tortugas, solo apto para buceadores expertos.
