La capital de la República Checa es una de las grandes maravillas de Europa Central para muchos turistas. Tanto su parte más antigua y clásica, como su rostro imperial, brindan al viajero elementos únicos para disfrutar de un lugar que no deja a nadie indiferente en su visita. Se trata de una villa que ha pasado por numerosos acontecimientos a lo largo de su historia, los cuales marcan con creces el carácter de Praga, un lugar que muestra diferentes rostros a los viajeros, todos ellos con un gran carácter, con variedad cultural y natural, así como con una gran riqueza gastronómica.
¿Sabes cómo llegar a la preciosa Praga?
En primer lugar, para todo el que desee viajar a Praga debe saber que existen diversas formas de llegar, ya que el país limita por tierra con varios estados, como son Eslovaquia, país con el que estuvo anexado; Hungría o Austria. De esta forma, es posible acceder por vía terrestre, ya sea en transporte público o privado.

De esta forma, la ciudad de Praga guarda una gran relación con todos los países de Europa, por lo que existen trayectos diarios con la gran mayoría de ciudades europeas capitalinas, así como con más de treinta compañías aéreas. Eso sí, al tratarse de una gran ciudad, existen vuelos a Praga directos también desde lugares como Asia o América, con grandes aerolíneas.
Todo por descubrir en Praga
La ciudad de Praga cuenta con más de quinientos años de historia viva, por lo que es posible disfrutar de hoteles cerca de Praga que se han convertido en edificaciones antiguas, con carácter remodelado. De esta forma, el centro de Praga ofrece una gran visión a todos los que se acerquen al lugar, y es que el centro de la villa se encuentra rodeada de hoteles, hostales y albergues de todo tipo y con diferentes precios.
Cabe destacar que todas las principales compañías hoteleras cuentan con un hotel en el centro de la villa, y también son muchos los hostales que rodean las calles principales del Puente Viejo o de la Plaza Central, aunque existen también albergues, muy transitados por los jóvenes y con un gran ambiente, que organizan además visitas guiadas, algunas de ellas gratuitas.
El Mercadillo Navideño de la ciudad
Sin duda alguna el mayor encanto de la ciudad de Praga es poder disfrutarla en Navidad, debido a que la ciudad entera se rodea de un halo de magia y misterio, así como de ensueño, que engloba todo el centro, con sus puestos, mercadillos y un sinfín de visitantes que se acercan al lugar. Por ello, la ciudad de Praga cuenta con numerosos rincones para disfrutar de una preciosa Navidad en pareja.

Puente de Carlos
Sin duda alguna, se trata del emblema turístico para las parejas que se acercan a Praga. Y es que este puente se encuentra lleno de candados, como manda la tradición, de parejas que se juran amor en dicho lugar y que prometen regresar al mismo sitio.
El puente se encuentra además muy cerca del Canal Certovka y del Muro de John Lennon, en el que las parejas suelen tomarse una fotografía. Además las luces de la calle y las farolas han sido iluminadas con candados y luces de todo tipo.
Žďár nad Sázavou
Muy cerca de Praga se encuentra esta localidad que guarda una de las maravillas de la República Checa, como es la Iglesia de San Juan Nepomuceno. Esta parroquia guarda la frase de las cinco puertas, cinco capillas y cinco estrellas. Y es que la iglesia lo tiene todo, además de los elementos que se mencionan.
Se trata de una parroquia Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, con una escultura que es obra del arquitecto Jan Blazej. Todo ello en honor a este santo checo, uno de los símbolos del país.
Plaza Vieja
Se trata de un plan muy atractivo si se viaja con niños, y es que en Navidad el lugar se ilumina de colores con el famoso Belén de la Plaza Vieja, instalado junto a un árbol de Navidad que cuenta con más de 100.000 luces y bombillas de todos los colores. Se trata de un lugar muy romántico que además ofrece a las parejas una rica perspectiva de la ciudad de Praga en el auge de su romanticismo.
Calles iluminadas
Uno de los matices más elegantes de la ciudad de Praga es que todas sus calles se encuentran iluminadas, así como las arterias comerciales. Desde el mes de noviembre y hasta enero, todas las calles del centro ofrecen un florido panorama para disfrutar al máximo de las compras, la Navidad y todo lo relacionado con lo típico de esta época del año.

Torre del antiguo ayuntamiento
Para descubrir una gran perspectiva de la ciudad de Praga, lo mejor es subir a la torre del antiguo ayuntamiento, y es que ofrece unas grandes vistas de la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga, con un mirador imponente desde el que se pueden tomar también excelentes fotografías, con varias perspectivas. Además, durante la Navidad se puede contemplar también las vistas de los diferentes árboles de Navidad del lugar.
Concierto de Navidad
Por otra parte, asistir a un concierto de Navidad es también una de las actividades más románticas que se pueden llevar a cabo en el centro de la ciudad de Praga, y es que la villa cuenta con una ópera excelente, con iglesias de todo tipo que organizan también conciertos de música sacra, así como pequeños certámenes o festivales de música que se celebran en varios puntos de la ciudad.
Mercadillos de Navidad
Sin duda alguna, lo que nadie puede perderse en su visita a Praga son los mercadillos, que abren en toda la ciudad desde mitad de noviembre y hasta inicios de enero. El mercado de la Plaza de la Ciudad Vieja es el mercadillo de mayores dimensiones de la ciudad y el más visitado, ya que está en la plaza central y ofrece además el espectáculo de un importante reloj astronómico, así como puestos de todo tipo de gastronomía local del país; aunque también el Mercado de la Plaza de Wenceslao.

¿Estás pensando un bonito destino para pasar estas Navidades? Sin duda viajar a Praga, conocer sus preciosos rincones, probar su gastronomía e involucrarte en su espíritu navideño es una genial idea.