A todos nos ha pasado alguna vez. Llegamos a nuestro destino vacacional, deshacemos la maleta y… ¡sorpresa! Hemos olvidado el bañador para ir a la playa pero, sin embargo, podemos elegir entre una gran variedad de pantalones y camisas para ponernos de gala a la hora de salir a cenar. Te ves obligado a buscar la tienda de souvenirs más cercana para enmendar el desaguisado, y cuando toca rehacer el equipaje para volver a casa caes en la cuenta de que no has usado ni la mitad de las cosas que te llevaste.
Para colmo, tu ropa está tan arrugada que resulta más que recomendable volver a meterla en la lavadora y darle un buen planchado. ¿Hay decisión más complicada que elegir qué es aquello que necesitamos llevar y lo que no va a hacernos ninguna falta?

Hay muchas personas que no se aclaran. Que no saben cómo hacer las maletas para que no se quede en tierra nada imprescindible ni tampoco llevar más peso de la cuenta. Por eso hemos pretendido ofrecerte algunos trucos para que aprendas todo lo que debes saber para hacer una maleta bien hecha.
Consejos para evitar quebraderos de cabeza a la hora de hacer el equipaje
En estas líneas encontrarás algunas claves que te ayudarán a evitar quebraderos de cabeza a la hora de hacer el equipaje. Lo esencial que debes tener en mente cuando te dispongas a poner en marcha los preparativos para emprender tu viaje de negocios o disfrutar de tus vacaciones.
Trucos para hacer la maleta y que todo esté en orden, puedas aprovechar mejor el espacio y no te falte nada importante ni tampoco lleves cosas que no te van a servir luego para nada.
Haz una lista de lo que vas a necesitar
Antes que empezar a guardar las cosas, lo primero que debes hacer es confeccionar una lista en la que anotes todo aquello que vas a necesitar en el destino al que vayas. Para ello debes tener en cuenta cuantos días va a durar tu desplazamiento, qué clima vas a soportar en el lugar donde te encuentres, qué cosas van a resultarte imprescindibles y cuáles podrás adquirir durante tu estancia…

Si vas a alojarte en un hotel de cinco estrellas, es absurdo que metas toallas o productos de aseo en tu equipaje puesto que lo tendrás a mano en tu habitación. Y, por muy elegante que sea tu traje de chaqueta o vestido de noche, no tiene sentido que te lo lleves si lo que piensas hacer es pasarte todo el dia tumbado en la piscina. Tampoco es lógico que guardes todo el armario en tu maleta si te vas a pasar un fin de semana.
Pon a mano todo aquello que hayas decidido llevarte
Una vez que hayas confeccionado la lista de las cosas que necesitas y la hayas repasado varias veces, lo siguiente es que saques todo lo que hayas decidido llevarte y lo tengas a mano. Así evitarás despistes de última hora, olvidos indeseados y, sobre todo, pérdidas de tiempo buscando aquello que te hace falta y no recuerdas ni por asomo donde lo tienes guardado.
Puedes poner toda la ropa, elementos de aseo y complementos encima de tu cama, y antes de guardarlo repasar que todo lo que hay apuntado en tu lista está controlado.
Elige la maleta adecuada
Es más común de lo que parece encontrarte con que todo lo que tienes que llevar no cabe en la maleta. Meterlo a presión no es la solución. Tampoco es conveniente llevarla medio vacía. Entre otras cosas, porque es más que probable que no la puedas pasar como equipaje de mano y tengas que pagar un plus de facturación en el aeropuerto si vas a viajar en avión. O que no te quepa todo en el maletero si decidiste irte en el coche.

Es recomendable que repares en este asunto, y elijas una maleta adecuada a tus necesidades. Que disponga del espacio que te hace falta y te ofrezca las prestaciones necesarias.
Enrolla la ropa para optimizar el espacio y evitar que se arrugue
La principal preocupación de los viajeros cuando llegan a su destino es encontrarse la ropa arrugada. Puede llegar a suponer un problema si donde te alojas no tienes la posibilidad de plancharla, o si no tienes tiempo para ponerte con ello.
Un truco es enrollar la ropa. De esta manera se mantiene sin arrugarse y, además, se optimiza mejor el espacio. Depende de la prenda de que se trate podrás o no poner en práctica este consejo. Lo que sí está claro es que una de las máximas de todo experto en hacer una maleta bien hecha es la de aprovechar cada hueco del que se disponga.
Lo más voluminoso, llévalo puesto
Para ahorrar espacio en la maleta te recomendamos que lleves puesto lo más voluminoso. Por ejemplo, si viajas a un destino donde va a hacer frío, puedes llevar encima el abrigo, el calzado y la ropa que más ocupe para liberar hueco y poder emplearlo en otras cosas que necesites.
La organización es una virtud
Parece una tontería, pero realmente importa. ¿Nunca te has visto impotente por no ser capaz de cerrar tu maleta, has pedido ayuda y te ha acabado sobrando sitio? Organizarse adecuadamente y colocar todo con un cierto orden te va a ayudar a que aproveches bien el espacio y, sobre todo, a que sepas en cada momento dónde tienes cada cosa y reduzcas las posibilidades de extravío.
No cargues al máximo la maleta
Deja un espacio libre, porque si no vas a tener muchas dificultades para guardar todo aquello que hayas comprado durante tu estancia. Si no eres previsor, puede pasarte que cuando vayas a rehacer el equipaje para volver a casa no seas capaz de meter todas tus cosas.

Separa y aisla tus líquidos y lleva bolsas de plástico vacías
Para evitar accidentes es recomendable que aisles adecuadamente todo aquello que sea susceptible de derramarse y estropear tu ropa. Guarda tus productos de aseo y el perfume en un neceser bien cerrado y meterlo en un compartimento separado del resto de tus cosas.
Y por último, antes de partir, haz un repaso para comprobar que está todo, y que no se te ha olvidado el cepillo de dientes o el cargador del móvil.