John Ford encontró en este árido paraje el decorado ideal para rodar sus filmes. También se han grabado aquí Forrest Gump o Thelma y Louise.
Toda visita a Utah estaría incompleta si no se conocieran sus asombrosos cañones desérticos, sus extensos valles, sus parajes montañosos (Montañas Rocallosas), el río Colorado y el río Verde y, cómo no, sus cinco Parques Naturales, en los que se puede practicar cualquier tipo de actividad como rafting, viajes en jeep, paseos en canoa o bicicleta, pescar, descansar, acampar… En fin, todo un mundo abierto de posibilidades para los amantes del aire libre y la aventura.
El suroeste de Utah, conocido como Colour Country, es el mejor punto para saltar a sus bellos escenarios naturales, que van cambiando de color por esa mezcla de zonas (cañones, riscos, montañas boscosas y dunas de arena). La otra opción es iniciar a explorar Utah por el sureste, también llamado Canyon Country, una tierra árida y rojiza en la que predominan cañones, grandes y pequeños, e imponentes arcos de roca que se formaron hace millones de años.
Monument Valley: Maravilloso…y real
Anclado involuntariamente en la frontera de Utah y Arizona, muy próximo a la esquina suroeste, este Parque Nacional que abrió sus puertas en 1923 no es un valle en el sentido amplio de la palabra; es más bien una gran depresión, ancha y plana, salpicada de elevaciones con forma de chimenea. La imagen más famosa del Monument Valley es un camino largo y ancho con altos promontorios alargados de más de 300 metros de altura que parte del centro de visitantes. Es el Valley Drive, el único camino de unos 30 kilómetros que permite observar sus aisladas mesetas, entre ellas el Totem Pole, una angosta torre de roca que puede llegar a medir unos cien metros de altura, y conocer la reserva de los indios navajo.
Y queda más. A unos 48 kilómetros al norte de Monument Valley, cerca del pueblo de Mexican Hat, se alza el Valley of the Gods, al que se accede por la US163. Cuando se llega a este extraño lugar todas las miradas se dirigen hacia una roca de aproximadamente unos 30 metros de diámetro que está sujeta por otra más pequeña, colocada en la punta de un promontorio rocoso.
Lo que no admite duda es que el Parque Nacional Arches es uno de los más trepidantes de Estados Unidos. Próximo al pueblo de Moab y a más de 1.000 metros de altitud, en este inhóspito paraje natural emergen más de 2.000 arcos de arenisca, pequeños y grandes, que poco a poco se van desintegrando. Desde finales del siglo XX se han caído más de 40 arcos, aunque quienes lo han visitado aseguran que siguen siendo uno de los marcos naturales más impactantes del mundo.
Mucho mejor que perderse por sus senderos es dirigirse a Devil´s Garden e iniciar una ruta por esta concentración natural de arcos. Aquí nos encontramos con varios puntos de interés, como Landscape Arch, el más largo del mundo, según muchos, gracias a sus casi 100 metros. Tras caminar unos 300 metros se aparece en la zona conocida como Skyline Arch, que guarda un arco muy peculiar que se puede disfrutar sin aglomeraciones. Desde este punto salen dos senderos: uno de 3 kilómetros que culmina en Sand Dune, y otro más largo, de 8 kilómetros, Broken Arch, que conducen a numerosas formaciones de roca. Siguiendo alguno de estos senderos podemos acabar en Fyere Furnace Viewpoint, un paraje muy similar a Bryce Canyon, en el que la erosión ha provocado miles de formaciones frágiles en tonos rosados, blanquecinos, amarillos y rojos.
El Wolfe Ranch es una vereda de 2,4 kilómetros que cruza un arroyo bajo un puente colgante que llega hasta el Delicate Arch, el arco más famoso de todo el Parque, y cuya imagen se utiliza, entre otras cosas, para ilustrar las matrículas del estado de Utah. Hay un sendero sencillo y corto, de unos 30 minutos, que permiten fotografiar el arco desde lejos. El otro camino de 5 kilómetros, que se tarda en realizar unas 2 horas, llega al anfiteatro en el que emerge el arco.
La denominada Windows Section cuenta con una mayor concentración de arcos y otras alineaciones con nombres como Double Arch, Cove Arch y Balanced Rock. En el área conocida como Turret Arch, a la que se llega tras recorrer un sendero de 2 kilómetros, aparecen 3 arcos alineados. Caminando hacia el otro lado, unos 400 metros, llegamos a Double Arch. El llamado Garden of Eden tiene muchos puntos en común con los montículos o chimeneas de la Capadocia (Turquía). Más allá, por el sendero Park Avenue Trail de 1,6 kilómetros llegaremos a una zona que nos recuerda a unos rascacielos. Subimos a su mirador, contemplamos estos promontorios rocosos y regresamos a nuestro punto de partida.
El otro gran cañón de Estados Unidos
Nunca han estado los niveles de agua del lago Powell como en los últimos años. Tras varios años de sequía las azuladas aguas han descendido considerablemente y nos han permitido descubrir en la Reserva Nacional Glen Canyon curiosas formaciones rocosas como la “Catedral”. Este enorme anfiteatro fue hace millones de años moldeado caprichosamente por la erosión. Y cuando pasamos los casi 250 kilómetros que ocupa el lago, se llega a una parte del cañón, más ancha y oscura, que también forma parte de esta gran obra maestra de la naturaleza.