Del 23 al 26 de junio la ciudad francesa, Patrimonio Mundial de la UNESCO, se convierte en capital del vino gracias al festival Fête le Vin.
De entre todas las regiones vinícolas de Francia, la de Burdeos es la más importante. Sus cifras así lo respaldan: 2.000 años de historia, 113.000 hectáreas de viñedos y 57 denominaciones. Los ríos Garona y Dordoña establecen los límites de la región, y la dividen en distintas subregiones. En torno a ellas hay establecidas seis rutas del vino: Médoc, Burdeos y Entre-deux-Mers , Sauternes y Graves, Saint-Emilion, Blaye y Bourg y la propia ciudad de Burdeos. Seis rutas que se convierten en siete durante la celebración del Festival del Vino, cuando se despliega un circuito de unos dos kilómetros junto al río Garona.
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Foto:Thomas Sanson
El festival Bordeaux Fête le Vin se celebra cada dos años durante un fin de semana del mes de junio. La de 2016 será la décima edición y tendrá lugar del 23 al 26 de junio. Toda una referencia internacional que se ha convertido en la cita de enoturismo más relevante de todas las que se organizan en Europa. Además de los vinos de Burdeos y de toda la región de Aquitania, estarán presentes caldos provenientes de otros muchos países. Diez ciudades tendrán un papel destacado gracias a su estatus de invitadas de honor: Bilbao, Ciudad del Cabo, Maguncia, Mendoza, Oporto, San Francisco, Valparaíso, Hong Kong, Québec y Bruselas. Estas tres últimas ya saben lo que supone formar parte del Bordeaux Fête le Vin. Las tres han actuado como sedes extranjeras del festival en años anteriores, dando a conocer el vino de Burdeos más allá de los viñedos de Aquitania.
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Foto: Vincent Bengold
Para disfrutar de esta décima edición de Fête le Vin se van a poner a la venta cuatro pases diferentes: Tasting Pass, que brinda acceso general al festival; Vineyard Pass, que permite descubrir toda la región gracias a excursiones programadas; Worldwide Wine Passport, para conocer la producción de las ciudades invitadas, y Grands Crus Classés 1885 Passport, el más especial. Ofrece la oportunidad de probar los prestigiosos vinos de la Clasificación Oficial de Burdeos de 1855 (ideada por el emperador Napoleón III) en el mismo lugar en el que se estableció, el Palacio de la Bolsa. Una degustación única de siete Grands Crus a la que solo podrán acceder 150 personas.
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Foto: Gilles Arroyo
Las citas no acaban de día, el vino sigue corriendo también al ponerse el sol. Todas las noches, a las 23 horas, se proyectará un espectáculo de luces en la fachada del Palais de la Bourse (Palacio de la Bolsa). Una proyección que, como no podía ser de otra forma, está ambientada en el mundo del vino y los viñedos. A este espectáculo de luces le siguen los fuegos artificiales, que se reflejan en el río. El toque musical llega de la mano de la Bordeaux Aquitaine National Orchestra, que interpretará varias piezas de música clásica en el espacio multicultural Darwin Halles. Este novedoso lugar, presentado como incubadora de ideas, está llamado a ser el centro de la vida cultural y artística de la ciudad.
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Foto: Gilles Arroyo
La agenda organizada en torno al festival se completa con actividades como Competitive Barrel Rolling, una carrera de barriles que pone a prueba la pericia de los toneleros. Habrá varias carreras durante los cuatros días que dura el festival, así que no hay excusa para perdérselo. También con ocasión de esta fiesta, atracará en Burdeos The Belem, un barco legendario en la historia de Francia. Construido en Nantes en 1896 para un trayecto transatlántico, sigue surcando los mares y acogiendo a marineros durante su época de formación. Con capacidad para 120 personas, su puerto base está en Nantes pero va a recalar en Burdeos del 22 al 27 de junio y podrá visitarse desde el viernes 24 al domingo 26.
Ciudad de las Civilizaciones del Vino
El festival del vino de Burdeos coincide este año con la inauguración del que está llamado a ser nuevo símbolo de la localidad: la Ciudad de las Civilizaciones del Vino. El 1 de junio se inaugura esta torre de cristal en el barrio de Bassins à Flot, construida junto al río, a modo de faro. En su interior se encuentra el centro cultural dedicado al vino más grande del mundo gracias a sus 3.000 metros cuadrados de exposición permanente y a sus 20 módulos temáticos. Se espera que reciba unos 450.000 visitantes al año. Todos ellos podrán descubrir el ‘savoir-faire’ de la cultura enológica del país, así como la tradición milenaria de su producción, «desde las tierras áridas de Mesopotamia a la bahía de San Francisco, de los montículos pedregosos bordeleses a los grandes espacios australianos». La Ciudad de las Civilizaciones del Vino supone una experiencia interactiva en la que todos los sentidos están alerta y juegan su papel. Cuenta con restaurante, sala de catas y un mirador con vistas panorámicas a Burdeos y a sus viñedos. Una buena alternativa para conocer de un solo vistazo la región vinícola más importante de Francia.
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XTU / ANAKA. Foto: ©Le cite du vin