Se puede viajar barato y necesario si se siguen algunos trucos a la hora de buscar alojamiento, billetes de avión, descuentos, cambiar dinero…
Realizar un viaje no significa gastarse mucho dinero. Lo primero es planificar el viaje en fechas poco comunes, ya que así tanto el coste del avión como el del alojamiento serán menores.
1. Billetes avión baratos. Comprar los billetes con mucha antelación puede reducir el coste de éstos hasta más del 50%.
2. Vuela entre semana. Se debe evitar volar los fines de semana, el precio aumenta considerablemente.
3. Exceso de equipaje. A la hora de hacer las maletas lo mejor es no cargarlas mucho para que la compañía aérea no cobre por exceso de equipaje.
4. Consigue vuelos baratos acumulando puntos. Únicamente tienes que registrarte de manera gratuita en la Web de la compañía. Una vez que metas tus datos, te darán un número de socio que deberás introducirlo en tus futuras compras. Así irás acumulando puntos/millas que podrás canjear por vuelos gratis.
5. Alojamiento. Lo mejor es buscarlo cerca del centro de las ciudades y con los servicios básicos, evitando incluir los desayunos y las comidas que incrementan considerablemente el precio. Si se viaja en grupo, lo mejor es alquilar un apartamento, pues el precio final es más barato y si hay cocina se ahorra en comida. Las mejores ofertas las encontrarás fuera de temporada. Lo más económico es reservar con entre 3 y 4 meses de antelación.
6. Transportes. Visitar las ciudades a pie siempre que sea posible es otra de las cosas que hará que el presupuesto del viaje no se dispare. Si el alojamiento está en el centro, los gastos en transportes serán notablemente menores, ya que los sitios de interés tienden a estar en esta zona de la ciudad.
7. Traslados. Utiliza los transporte públicos para realizar los traslados desde al aeropuerto al centro de la ciudad y viceversa. Es más económico que ir en taxi.
8. Hazte con la tarjeta turística. Es recomendable adquirirla si vas a entrar a casi todos los principales sitios de interés de una ciudad. Normalmente incluyen la entrada a museos e interesantes descuentos en tiendas y restaurantes.
8. Entradas gratuitas. A la hora de visitar los atractivos de la ciudad, hay que planificar las visitas con antelación teniendo en cuenta si hay días de entrada gratuita o descuentos.
9. Guías gratis. En muchas ciudades se ofrecen tours completamente gratuitos ofrecidos por locales a cambio normalmente de una propina.
10. Si eres estudiante, no olvides viajar con la tarjeta de tu universidad para conseguir descuentos en los museos.
11. Dinero. Si viajas fuera de la zona euro, consulta en tu entidad habitual el tipo de cambio. Normalmente suele salir más caro cambiar en el aeropuerto que en las casas de cambio de los centros de las ciudades. Lleva un poco más dinero de lo que creas que vas a necesitar.
12. Tarjetas de crédito y de débito. Cada vez que saques dinero en un cajero en el extranjero te van a cobrar una comisión elevada, así que utiliza las tarjetas en casos excepcionales.
13. Comida. Los restaurantes que están cerca de los principales sitios de interés siempre son más caros. Entra a comer en los restaurantes en los que veas a gente local, ellos saben dónde se come bien, a precios asequibles.
14. Teléfono. Si vas a utilizar mucho tu teléfono móvil, compra en el destino una tarjeta SIM local. Lo más caro es usar el servicio roaming de las compañías telefónicas. Otra opción es hablar mediante Skype.