La geografía española todavía esconde secretos. Lugares y pueblos que están al margen de las grandes rutas turísticas, pero ofrecen al viajero numerosas recompensas para sus sentidos. En estos parajes, los colores y olores parecen más intensos y el placer de descubrirlos no está solo en llegar a ellos, sino también en disfrutar de cada viaje a estos destinos rurales escondidos.
1. Somiedo (Asturias)

Somiedo es un pequeño pueblo que se encuentra dentro del Parque Natural del mismo nombre. Llaman la atención sus construcciones típicas, que tienen un teito(techo) fabricado con brezo y otros materiales vegetales. El entorno en el que se encuentra es espectacular: montañas escarpadas, ríos nacientes, sinuosos valles de intenso color verde y lagos azules que parecen de película.
Cómo llegar
Para descubrir Somiedo, puedes salir de Oviedo por la A-63 y luego tomar la AS-227. En menos de hora y media podrás completar los 79 kilómetros de distancia.
2. Comarca de los Valles Pasiegos (Cantabria)

Los Valles Pasiegos son cuatro valles por donde discurren varios ríos y sus afluentes, en el sureste de Cantabria. En esta zona montañosa, se encuentran varias poblaciones rurales y espacios naturales protegidos. A pesar de su abrupta orografía, estos valles fueron ya habitados en la Prehistoria. En la Edad Media, la construcción de monasterios y templos dejó su huella en un territorio donde sus gentes, los pasiegos, vivían de la ganadería trashumante.
Cómo llegar
Para conocer la comarca de los Valles Pasiegos, puedes salir desde Torrelavega, tomar la N-634a hasta Las Presillas y continuar hacia el sur.
3. Piornedo (Galicia)
En la provincia de Lugo, se encuentra nuestro tercer destino: Piornedo. Esta aldea prerromana aún conserva sus tradicionales pallozas, las viviendas de montaña típicas de esa zona gallega de la sierra de Os Ancares. La complicada orografía también ha colaborado, en este caso, en mantener una cultura diferenciada. Otra población similar en la misma sierra es O Cebreiro, que cuenta con un parque etnográfico y es el primer pueblo gallego del Camino de Santiago francés. La zona ofrece muchas posibilidades para practicar senderismo y hoteles rurales cercanos.
Cómo llegar
Desde Lugo, tienes varios trayectos para llegar a Piornedo en una hora y media.
4. Castro de Baroña (Galicia)
En la costa gallega, también hay un lugar especial en el municipio de Porto do Son (A Coruña). Junto a la playa de Baroña encontrarás un espectacular castro, un asentamiento de la Edad de Hierro que se abandonó en el siglo I. La particularidad principal de este remoto destino es la ubicación en la que se construyó este castro, en una pequeña península rocosa junto a la playa. Se cree que sus habitantes vivían de la pesca. Otra característica destacada es la buena conservación del enclave, que mantiene la estructura de sus veinte viviendas familiares circulares y ovaladas.
Cómo llegar
Puedes llegar desde Porto do Son, tomando la C-550 en dirección a Ribeira.
5. La Garganta de los Infiernos (Extremadura)

La Garganta de los Infiernos es una impresionante reserva natural que se encuentra en el valle del Jerte, en la provincia de Cáceres, y contiene infinidad de pequeñas pozas naturales, toboganes esculpidos en las rocas por efectos de la erosión, arroyos y cascadas. Una sucesión de guiños de la orografía que se acompaña de vistosos colores para diseñar un paisaje que parece de otro planeta. Las poblaciones más cercanas son el caserío medieval de Cabezuela del Valle y Jerte.
Cómo llegar
Si quieres conocer la zona, puedes salir de Plasencia, hacia Cabezuela del Valle, por la N-110. Llegarás en poco más de media hora.
6. Desierto de Tabernas (Andalucía)

En la provincia de Almería, con el más puro sabor del oeste americano, se encuentra el Desierto de Tabernas. Es un paraje natural protegido que, en los 60 del pasado siglo, sirvió para rodar algunas películas de vaqueros, entre las que se encuentran las conocidas Por un puñado de dólares o El bueno, el feo y el malo.También sirvió de escenario natural para otras producciones, como Lawrence de Arabia. Hoy aún se pueden ver algunos decorados de su antiguo esplendor. Por su espectacular paisaje y pasado cinematográfico, bien merece una visita.
Cómo llegar
Puedes llegar al Desierto de Tabernas desde Almería, ya que está a solo 30 kilómetros de la capital hacia el norte.
7. La Selva de Irati (Navarra)

Del desierto a la selva. Su singularidad está en ser uno de los mayores bosques de hayas y abetos de Europa. La Selva de Irati invita a un colorido paseo por senderos rodeados de una gran variedad de flora y fauna. Incluso, con ciervos y los pájaros carpinteros, que están en peligro de extinción. Un viaje al centro de los antiguos bosques que cubrían el continente.
Cómo llegar
Desde Pamplona, por la carretera N-135, en dirección norte.
8. Río subterráneo de San José (C. Valenciana)

Un río subterráneo es un destino muy escondido. En la provincia de Castellón, los caprichos de la naturaleza han situado un río en Les Coves de Sant Josep, situadas en el paraje natural del mismo nombre. Los viajes por el río empiezan en el embarcadero de la entrada, desde donde se llega a la Sala de los Murciélagos.
Cómo llegar
Aunque no es un destino desconocido para quienes visitan Castellón, si no sabías de su existencia, puedes llegar desde La Vall d´Uixó, municipio donde se encuentra este espectacular río subterráneo.
9. Frías (Castilla y León)
En la provincia de Burgos, se encuentra la ciudad más pequeña de España: Frías. Bañada por el río Ebro, esta localidad construida sobre unas ruinas romanas apenas pasa de los trescientos habitantes. Frías luce una llamativa silueta sobre el horizonte, al erigirse sobre un peñasco, algo que le servía de protección. Pero la escasez de espacio obligó a las casas a colgar del desfiladero, lo que le aporta un singular aspecto. Sus rutas de senderismo a lo largo del río y valle que rodean al pueblo hacen de Frías un destino a descubrir.
Cómo llegar
Desde Burgos, hay 80 kilómetros. Puedes coger la autopista y, luego, la carretera Bu-504, en dirección norte.
Ahora que te hemos acercado los lugares más recónditos y salvajes de nuestra geografía, no dejes escapar la oportunidad de visitarlos.