Hotel A Quinta Da Auga

A Quinta da Auga es un hotel de lujo situado en uno de los preciosos bosques autóctonos que rodean la ciudad de Santiago de Compostela, Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. La finca, de 10.000 metros cuadrados, está envuelta por un meandro del río Sar, que inspiró los poemas de Rosalía de Castro. 

La historia del espacio que hoy ocupa este alojamiento se remonta al siglo XVIII, cuando se erigió aquí una fábrica de papel, ligada a la intensa actividad editorial de Santiago, gracias al renombre de su universidad. La factoría se aprovechaba de la cercanía del río para canalizar el agua y utilizar la energía del cauce.

Posteriormente, el edificio se reinventó varias veces: fue un batán para curtir tejidos, aserradero y fábrica de hielo y cerveza, hasta que cayó en el abandono. Tras décadas de inactividad, una pareja de hosteleros realizó una gran reforma del complejo y lo convirtió en A Quinta da Auga, uno de los hoteles de referencia en Santiago.

Todos los detalles de este hotel están pensados para que el visitante quede cautivado por una atmósfera de otra época. La decoración, el ambiente, los colores, la iluminación, el trato del personal, la arquitectura... Todo suma para convertir el establecimiento en un lugar inolvidable. El restaurante Filigrana, con alta cocina gallega, las instalaciones de spa, un programa de actividades de todo tipo y sus salas adaptadas para reuniones y eventos completan una oferta inigualable.

Cuenta con 39 habitaciones dobles superiores, cinco dobles estándar y una suite. Cada una de ellas está decorada con un toque personalizado, combinando el diseño clásico y el contemporáneo. Todos los cuartos tienen vistas al cautivador bosque de robles y árboles de ribera, conexión de alta velocidad a Internet y climatización con suelo radiante, lo que aumenta la calidez y comodidad de los huéspedes.

La dirección exacta de A Quinta da Auga es Paseo da Amaia, 23B, 15706 Santiago de Compostela. El hotel está a pocos metros de la carretera AC-543, en la salida este de la ciudad, muy cerca del Hospital Clínico y del Campus Sur de la universidad. En la zona existen paradas de taxis y autocares que en pocos minutos te dejarán en el centro de Compostela. Para quien guste de ir caminando con calma, el casco histórico se alcanza en unos cuarenta minutos a paso tranquilo.

Santiago de Compostela, declarada Patrimonio de la Humanidad en 1985, es una pequeña ciudad con una amplia y cautivadora zona histórica, que atrae cada año a un mayor número de visitantes. El Camino de Santiago, una ruta que cruza Europa, llena la ciudad de peregrinos que culminan aquí su sueño al llegar a la Praza do Obradoiro, donde se encuentra la catedral.

Además de este templo, símbolo de Compostela, Santiago cuenta con numerosos rincones y monumentos que bien merecen una visita. Las Prazas da Quintana y Praterías, el Parque da Alameda, con unas impresionantes vistas de la ciudad histórica, la Rúa do Franco, salpicada con decenas de restaurantes de deliciosa comida gallega, el mercado de Abastos, con puestos de productos tradicionales de la tierra, y las decenas de callejuelas llenas de historia, cultura y tradición que vertebran la ciudad enamorarán al visitante.

El personal de A Quinta da Auga conoce de primera mano la historia y el patrimonio de Santiago de Compostela, por lo que te ofrecerá una propuesta turística adaptada a medida. Estos son algunos de los lugares que merecen una visita obligada.

Parque da Alameda

Un gran pulmón verde en el centro de la ciudad. A pocos metros de la catedral se extiende este parque, en el que vecinos y turistas conviven paseando por sus avenidas rodeadas de árboles autóctonos. Pero el verdor que regala el suave clima atlántico no es su único atractivo. Hay estatuas de famosos escritores gallegos, como Rosalía de Castro o Valle Inclán, y zonas de alto valor botánico por su gran variedad de flores y árboles.

Praza da Quintana

Al otro lado de la Praza do Obradoiro, en la fachada sur de la catedral, se extiende esta plaza, muy transitada por los turistas y peregrinos. Por aquí se accede a la Porta Santa, que solo se abre durante el Año Jacobeo, cuando el 25 de julio cae en domingo.