Hoteles en Cabo de Gata
La expansión de ágatas en la zona, que había inspirado a los fenicios para nombrarla, hizo retomar su nombre durante la Edad Media, para llamarlo el Cabo de las Ágatas. Por contracción fonética, concluyó por implantarse el que es utilizado en la actualidad.
Un destino inigualable que no puedes perderte. Gracias a Viajes Carrefour, contarás con una variada oferta de hoteles en Cabo de Gata.
En él tendrás la oportunidad de deleitarte con el parque Cabo de Gata-Níjar y sus lugares de interés, como su multitud de playas y calas. Como a los poetas, viajeros románticos, cineastas y publicistas que allí han recalado, te conmoverá la disparidad entre el azul del cielo almeriense y la deslumbradora luz que se refleja en los terrenos áridos de la zona de Cabo de Gata-Níjar.
Esta área es un lugar privilegiado por sus paisajes y belleza. Igualmente, disfrutarás de hoteles baratos en Cabo de Gata y apartamentos cómodos y económicos, con todo incluido. Se establece parcialmente en los términos municipales de Almería capital, Níjar y Carboneras. Además de silvestres acantilados con vistas sensacionales, cuenta con playas naturales paradisiacas como las de Mónsul y Genoveses. A ellas se suman las playas urbanas, con todos los equipamientos e inmejorables condiciones, distinguidas con la bandera azul.
Para los valientes, goza de múltiples calas a las que pueden acceder con un poco de esfuerzo. Si te atreves, solo tienes que bajar por terrenos rocosos o divisarlas haciendo el trayecto en pequeñas embarcaciones.
Propias de un clima semiárido, único en Europa, encontrarás vegetación como palmitos, esparto, especies de agave o azufaifos. Asimismo, contarás con un paisaje geológico volcánico con coladas de lava, domos o playas fósiles.
Sus aguas cristalinas de color turquesa te obsequiarán con un fondo marino variado. Si eres apasionado del buceo, podrás divisar amplios espacios ocupados por el alga posidonia, que acogen gran variedad de peces, moluscos, cangrejos, etc.
En cuanto a la fauna terrestre, posee semejanzas con otras zonas del Mediterráneo, aunque destacan sus peculiares reptiles, como el lagarto ocelado y la víbora hocicuda. Principalmente destacadas son las aves que pueblan las salinas del propio cabo. Puedes avistarlas desde algunas de las casetas ubicadas para tal fin.
No olvides la huella humana dejada en el parque que da testimonio del paso de los árabes por él. Aljibes, norias, alfarería y torres defensivas y de vigilancia son algunos de los vestigios que apreciarás.
El faro del Cabo de Gata es otro de los emplazamientos que no has de desaprovechar. Cuando te encuentres en él ya puedes decir que has estado en la parte más oriental de la península Ibérica. Junto a él, encontrarás el mirador de las Sirenas, edificado en el morrón del cabo. Conocido ya por griegos y fenicios, ha sido empleado durante toda la historia como lugar de referencia para los navegantes.
Por otro lado, las salinas de esta zona son las únicas que aún permanecen activas de toda la Andalucía Occidental. Además de su valor productivo, gozan de un atractivo ecológico mucho mayor, ya que en ellas habitan múltiples especies animales y vegetales. El inicio de la explotación salinera puede remontarse a las civilizaciones fenicia y cartaginesa, aunque de la época romana se sabe que ya existía una industria de la salazón.
Especialmente destacables son las más de 100 especies de aves que habitan o transitan por estos humedales. Un 70 % lo utilizan como lugar de descanso en su proceso migratorio. El resto han hecho de este enclave su zona de residencia, al estar caracterizado por inviernos templados. Los flamencos rosados son la especie peculiar de la zona, en verano pueden contarse hasta miles de ejemplares de esta especie, ya que coincide con su periodo migratorio.
Los Escullos es otra de las áreas que merece la pena visitar. Se trata de la duna fosilizada más grande del Parque Natural. Otros modelos de esta formación geológica los puedes avistar en las playas de los Genoveses y el Playazo de Rodalquilar. Formada durante la era cuaternaria, hace más de 100 mil años, se fraguó cuando el mar Mediterráneo cubría toda la zona.
La tierra de Afrodita, paraíso natural y mágico que es el Cabo de Gata, te sorprenderá por su riqueza natural y arquitectónica. No es de extrañar que todas las civilizaciones que han pasado por ella la hayan guardado como un tesoro. Fenicios, cartagineses, romanos y un largo etcétera la han custodiado y nutrido.