El hotel se encuentra en el centro de Cerler, en pleno valle de Benasque, muy cerca de la estación Aramón. El establecimiento se reparte en varias edificaciones en torno a un gran patio central empedrado. El edificio principal responde a la característica arquitectura del Pirineo Aragonés, con muros de piedra, tejados de pizarra, ventanas pequeñas y balcones de madera. Los edificios anexos, antiguas caballerizas y cuadras, acogen hoy parte de las habitaciones del hotel, así como zonas comunes (restaurante, bar-rústico, terrazas acristaladas...). Todo el conjunto hotelero se encuentra salpicado por frondosos rincones verdes, con grandes árboles de sombra, perfectos para sentarse durante las tardes de verano. El restaurante del Hotel Casa Cornel, en donde se pueden degustar productos típicos de la zona, se encuentra en uno de los anexos, junto al comedor, un acogedor espacio con mobiliario de época y detalles rústicos, como los suelos de barro o las vigas vistas de madera. El salón comunitario, presidido por una chimenea de piedra, se reparte en varios espacios para la lectura, ver la televisión o descansar tranquilamente al resguardo del fuego. El estilo de las habitaciones puede sorprender. Parte de ellas sigue la línea decorativa del resto del hotel, con mobiliario antiguo, tonos cálidos y predominio de la madera natural; el resto, responde a un estilo moderno y fresco, con muebles de diseño, luces indirectas o grandes murales que crean una fusión perfecta con los techos de vigas antiguas. El bar del establecimiento se encuentra en uno de los edificios contiguos al principal y ofrece un ambiente cálido y familiar, con su gran barra de madera y su chimenea de piedra natural.
El hotel dispone de 21 habitaciones (individuales, dobles, suites y dúplex) repartidas entre el edificio principal y uno de los anexos. Todas ellas cuentan con calefacción y baño totalmente equipado con bañera, ducha acristalada y secador de pelo, además de televisión de pantalla plana y teléfono.
Las instalaciones del hotel están preparadas para recibir a personas con problemas de movilidad, con rampas y ascensor. Dispone de zona Wi-fi, parking privado, área ajardinada con solarium, bar y restaurante. En la recepción, que ofrece información turística y servicio de guarda-esquís, se pueden solicitar cunas para bebés.