Hotel Convento Tarifa

El Hotel Convento Tarifa es uno de los pocos hoteles que se encuentran edificados sobre un edificio antiguo del siglo XIX, totalmente reformado para el disfrute de los turistas.

Se sitúa en la calle Batalla del Salado, número 14, por lo que estaremos a 6 minutos andando de una de las más hermosas playas de Cádiz, perfecta para disfrutar del sol y de la buena comida típica de nuestra emblemática ciudad.

Dentro del hotel reside un vasto jardín, cuidado de forma impecable y rodeado por una fabulosa muralla de un antiguo convento cristiano.

El check in se puede hacer a partir de las 14 h y el check out hasta las 12 h.

Contamos con un wifi totalmente gratuito que permite a los clientes relajarse viendo una película en sus habitaciones o presumir de vacaciones ideales en sus redes sociales.

Si algún familiar o amigo que llega a nuestro hotel tiene movilidad reducida, no habrá ningún problema ya que tenemos instalado el acceso para ellos en todas nuestras zonas: su visita resultará fácil y nadie tendrá que preocuparse por nada. Además, gracias a nuestros ascensores es posible acceder tranquilamente a cada habitación y a nuestros restaurantes.

Dentro de nuestro hotel contamos con 10 maravillosas habitaciones. Todas ellas disfrutan de grandes ventanas, por lo que son muy luminosas. Para los amantes del estilo clásico, se trata de un lugar especialmente muy bueno, ya que sus estancias están decoradas con muebles y colores suaves totalmente característicos del siglo XIX.

En ellas incluimos televisión con pantalla plana, baño privado, wifi de red local, aire acondicionado para los días más calurosos del año y calefacción para el invierno.

Nuestro personal de información está a disposición de los huéspedes para resolver cualquier duda existente. También proporcionamos amplia y personalizada información turística, idónea para guiarse por por nuestra ciudad.

Nuestro Hotel Convento Tarifa se encuentra ubicado en Tarifa, Cádiz, más concretamente en la calle Batalla del Salado, número 14.

A escasos 100 metros de distancia es posible contemplar la Puerta de Jerez, la cual se puede visitar andando. Después de la reconquista realizada por los cristianos se ampliaron las murallas y, con ellas, se abrió la preciosa Puerta de Jerez. Tiene un estilo claramente árabe, ya que fueron ellos los que la construyeron y, con posterioridad, los cristianos la ampliaron e hicieron, de este modo, la entrada principal a la ciudad de intramuros.

Por otra parte, en a penas 600 metros de paseo llegamos a una de las preciosas playas de nuestra ciudad, la playa de los Lances. Cuenta con kilómetros y kilómetros de arena fina y agua cristalinas. Estas características hacen de esta playa uno de los mejores lugares para practicar deportes de agua.

En ella podremos disfrutar del windsurf y del surf. También se pueden recibir clases de kitesurf adaptadas a los diferentes niveles del usuario. Sin duda, es una de las visitas obligatorias.

Avistamiento de cetáceos en la Whale Watch Tarifa

Esta actividad es para toda la familia. El avistamiento de cetáceos consiste en salir al mar con uno de sus barcos e identificar a las ballenas y delfines que viven en el Estrecho de Gilbrartar, así como los que lo surcan.

Este recinto está calificado como parque natural, ya que es el hogar de tres clases de delfines diferentes: el común, el Listado y el Mular. Todos ellos conviven en armonía y paz con los calderones comunes durante todo el año.

También podemos observar los cachalotes durante todo el año, mientras que las orcas son más habituales en los meses calurosos: julio y agosto. La diversión con los delfines está asegurada en un entorno único y natural.

Castillo de Tarifa: Castillo de Guzmán el Bueno

Justo al lado del puerto de Tarifa nos encontramos con su castillo más emblemático. Es conocido como el castillo que cubre la ciudad más meridional de la península, ya que da al estrecho de Gibraltar.

Lleva el nombre del que por aquel entonces era el alcaide de la fortaleza. En 1294 el castillo fue asediado por los moros durante largo tiempo hasta que se hicieron con el hijo de Don Guzmán. Le instaron a que se rindiera o, delante de él, matarían a su hijo. El alcaide prefirió sacrificar a su hijo antes que la ciudad.