Hotel Ibis Paris Alesia Montparnasse

Ibis París Alesia Montparnasse es un hotel económico y versátil, destinado tanto al viajero de negocios como al visitante que busca descubrir la ciudad de las luces. Ofrece un alojamiento práctico y funcional, adaptado a las necesidades fundamentales del huésped que busca un lugar cómodo y tranquilo donde pernoctar y descansar tras un largo día de trabajo o de turismo tras explorar la ciudad. Las habitaciones sencillas y completas y los servicios de restauración en el propio hotel cumplen perfectamente esta función.

Tiene 264 habitaciones repartidas en varias plantas. Cinco de ellas están adaptadas para huéspedes con movilidad reducida. Cuenta con diez habitaciones familiares y doce habitaciones comunicadas. Las familias podrán encontrar acomodo adaptado a ellas gracias a la opción de requerir cama adicional para niños o cuna, así como de cama adicional para adulto.

Las habitaciones del hotel Ibis París Alesia Montparnasse disponen de baño completo. Tienen aire acondicionado, televisión con los principales canales, teléfono y conexión a internet inalámbrica, así como puerto de datos, escritorio y radio. Su decoración es moderna y funcional, fundamentada en los juegos de contraste entre el blanco y la madera, con toques algo más atrevidos en algunas de las habitaciones. La atmósfera resultante transmite sensación de limpieza y orden, de forma que resulta muy acogedora.

Si no concibes irte de vacaciones y dejar atrás a tu mascota, no te preocupes: en el Ibis París Alesia Montparnasse admiten animales. Solo tendrás que pagar un pequeño recargo para que tu mejor amigo peludo te acompañe en tu aventura. El hotel es 100 % para personas no fumadoras.

Desde su ubicación podrás alcanzar fácilmente el centro histórico de París en transporte público, y también el centro de exposiciones Porte de Versailles. Ya sea el motivo de tu viaje el turismo o los negocios, esta ubicación resulta muy práctica.

El hotel Ibis París Alesia Montparnasse está ubicado en 49, Rue des Plantes, París, Francia. Las paradas de metro más cercanas son Alesia y Porte d'Orléans y desde ellas podrás alcanzar los principales lugares de interés de la ciudad de las luces.

Es posible visitar todos los lugares icónicos mediante transporte público. Se puede llegar con facilidad a los grandes museos de París. Elige el tuyo en función de tus preferencias: el Louvre si te atrae la historia del arte antiguo, el Pompidou si quieres sumergirte en la vanguardia del arte contemporáneo. La auténtica experiencia parisina no está completa si no te acercas a la Torre Eiffel.

Para sentir el París más bohemio, busca el barrio de Montmatre y descubre entre sus calles todo su encanto, a la sombra del Sacré Coeur. Entre sus calles iluminadas, podrás encontrar lugares tan famosos como el Moulin Rouge, pero es el ambiente bullicioso lo que le da su carácter a este barrio parisino.

Notre Dame de París

Esta impresionante catedral gótica está en la parada de Cité, a once paradas de metro, sin necesidad de hacer trasbordo, de la parada de Alesia. Su modelo constructivo influyó en toda Europa y se trata de un monumento cuya visita es imprescindible para quien recala en París.

Ha aparecido en varias obras de ficción. Recibió daños irreparables durante la Revolución Francesa, pero sucesivas restauraciones le han devuelto todo su esplendor. Los más valientes pueden atreverse con los 387 escalones de sus torres para disfrutar de unas vistas incomparables de París.

La catedral abre de lunes a viernes de 8:00 a 18:45 y de 8:00 a 19:15 los sábados y domingos.

Barrio de Montparnasse

Este barrio histórico se encuentra muy cerca del hotel y está lleno de historia. Durante el siglo XIX y principios de XX se convirtió en el lugar de residencia preferido por artistas e intelectuales de París, de forma que sus cafés y locales se llenaron de intelectuales de primera línea como Matisse, Miró, Hemingway o Modigliani. Montparnasse se encontró así convertida en cuna de movimientos de vanguardia.

Su configuración urbana, donde se cruzan avenidas amplias y callejuelas llenas de encanto, hace que el paseo por este barrio sea agradable y romántico. No te pierdas las vistas desde la Torre Montparnasse, inaugurada en 1973, desde cuya terraza en la planta 56 se puede contemplar todo París tras subir a ella en un cómodo ascensor.