Este hotel se halla en el centro de Kenmare, en la Henry Street, y es muy fácil de llegar hasta él, ya que Kenmare es una pintoresca localidad con una población de solo 1.500 personas. Kenmare se sitúa en los anillos de Kerry y Beara, y se llega fácilmente por tierra, mar (los trasbordadores que vienen de Francia llegan a la cercana localidad de Cork) y aire (el aeropuerto de Kerry dista 48 km, el de Cork 96 km). Es el centro turístico ideal desde el que descubrir la afamada belleza de la accidentada costa y las montañas del interior. Hay numerosos restaurantes, bares, pubs, lugares para salir por la noche y tiendas a unos 100 m del hotel, el cual queda a 2 minutos a pie de las paradas de transporte público y de la estación de autobuses.
Este establecimiento de 10 habitaciones, renovado en 2009, ofrece una experiencia inolvidable y de calidad en los ámbitos gastronómico, de bebidas y alojamiento, en uno de las joyas ocultas de Irlanda: Kenmare, en el condado de Kerry. Ofrece instalaciones comunes a los huéspedes como zona de recepción, bar, pub, sala de TV y restaurante, así como conexión a Internet en las zonas públicas y sótano para dejar las bicicletas. Los huéspedes que lleguen en coche pueden dejarlo en el aparcamiento del hotel.
Las habitaciones con cuarto de baño privado son amplias y han sido diseñadas pensando en la comodidad de los huéspedes. Además del cuarto de baño privado con ducha, bañera y secador de pelo, disponen de TV con 6 canales, teléfono, conexión a Internet y cafetera/tetera. Otras comodidades estándar son cama doble o extra grande y calefacción central. Las habitaciones se encuentran lejos de la zona de la calle y dan a la parte trasera del edificio, lo que permite eliminar los ruidos del tráfico de Kenmare; también quedan lejos de la zona de bares para asegurarse de que los huéspedes gozan de un descanso nocturno ininterrumpido y placentero.