Hotel Algarve Casino

El Hotel Algarve Casino está situado en la zona privilegiada del Algarve. Se trata de un complejo hotelero de cinco estrellas con maravillosas vistas al Atlántico en el que diferentes tipos de clientes tienen cabida: ideal para los que buscan descanso y playa, perfecto para viajar en familia, ya que cuenta con dos piscinas y con animación, y, por último, los empresarios encontrarán también en sus instalaciones un buen lugar para las reuniones de negocios.

Su atractivo radica tanto en su situación privilegiada como en la gran variedad de servicios y ocio que ofrece, entre ellos un casino y modernas salas de juego. La oferta gastronómica es muy amplia, ya que cuenta con restaurantes y bares de distinto estilo para poder elegir según el gusto de cada miembro de la familia o simplemente según el momento del día. Las noches son amenizadas con variadas veladas musicales que ponen la nota especial a las noches de verano.

Praia da Rocha es una de las poblaciones turísticas más populares de la zona, con amplias playas de una gran belleza que alternan kilómetros de arena fina con rocas, acantilados e incluso grutas que enamoran a sus visitantes, sobre todo con marea baja porque se vuelven inmensas, el agua es cristalina y el baño es una experiencia inolvidable. En su costa, los amantes de los deportes acuáticos pueden disfrutar a sus anchas, ya que reúnen excelentes condiciones para la práctica del surf y de diferentes deportes náuticos, el Algarve Casino se encuentra muy cerca del puerto deportivo de Portimão. También hay la posibilidad de practicar golf en sus cercanías.

Su población es sociable y acogedora y el ambiente de la zona es divertido y distendido. A las cualidades que ya hemos descrito se le suma la variedad de atractivos turísticos que se pueden visitar en su cercanía.

El Hotel Algarve Casino está situado en la zona del Algarve, concretamente en la Avenida Tomas Cabreira, Praia da Rocha, 8500-802, Portimão. Se encuentra muy cerca del puerto deportivo de Portimão.

Portimão, la ciudad más importante del suroeste del Algarve, se caracteriza tanto por su casco antiguo como su puerto deportivo y sus múltiples playas. Posee unas buenas comunicaciones, ya que hay una autopista que recorre la zona empezando en Vila Real de Santo Antonio hasta Lagos. En cuanto a los medios de transporte, muy cerca está el aeropuerto de Faro y, por supuesto, se puede llegar en tren o autobús.

El edificio de planta rectangular con cuatro torres, una en cada esquina, cuenta en la actualidad con servicios de restauración donde disfrutar también de actuaciones musicales, pudiendo visitar igualmente la ermita y deleitarse con las impresionantes vistas desde su mirador.

Dentro de las actividades que se pueden realizar en las inmediaciones del hotel, resaltamos la visita a las cuevas de Benagil a bordo de un crucero de un día. También se puede recorrer en barco la costa de Portimão, hacer una excursión para ver delfines o descubrir la historia de Portimão remontando en barco el río Arade. 

Lugares emblemáticos

Situada en el casco histórico de Portimão, es visita obligada la iglesia gótica de Nossa Senhora de Conceiçao conocida como Iglesia Matriz de Portimão y construida a finales del siglo XV. Curiosos son los azulejos del siglo XVII que podemos contemplar en su interior junto con la imagen en mármol de São Pedro y algunos crucificados.

Al sur de Praia da Rocha podemos visitar la fortaleza medieval de Santa Catarina de Ribanar. Situada justo en la desembocadura del río Arade en el mar, se construye con el fin de impedir que piratas e invasores remontaran el río y llegaran hasta Portimão.

Fiestas populares

A pesar de su cierta trayectoria, ya que se creó en el año 2010, el Festival de la Sardina es la celebración más esperada y divertida en Portimão, durante su celebración, los habitantes preparan las sardinas a la parrilla y las sirven acompañadas de patatas, pimientos y vino. No falta la música, actuaciones de fado de la mano de grandes artistas que hacen las delicias de los visitantes. Incluye también la venta de artesanía típica y hecha a mano que los visitantes compran a modo de recuerdo. Los fuegos artificiales iluminan el cielo sobre el puerto. Su celebración coincide con la segunda semana de agosto.