Hotel Dom Jose Beach Hotel

Cuando pensamos en playas y sol, inmediatamente se nos vienen a la cabeza las playas de arena blanca del Algarve, y no es para menos, puesto que son de una calidad incomparable. ¿Y qué mejor que desconectar del día a día rutinario en uno de los hoteles que están mejor ubicados en esta zona? Nos referimos del hotel Dom José Beach Hotel, en Quarteira.

Este alojamiento está en la misma playa, y para entrar o salir de él tendremos que pisar la arena, con lo cual, la experiencia comienza en ese mismo momento, a la misma vez que disfrutamos también de una vista completamente deslumbrante del color azul del océano atlántico. 

El Dom José Beach Hotel es un pequeño hotel familiar, pero que tiene un gran encanto. A lo largo de sus 50 años de historia, ha ido evolucionando con el turismo del Algarve hasta hoy, de modo que ha sido reconocido durante 5 años seguidos como Mejor Hotel de 3 estrellas del Algarve portugués. 

Además, podemos alojarnos en un hotel en el que en el año 1984 se alojó la selección portuguesa de atletismo, entre los que se encontraba Carlos Lopes, que consiguió el primer Oro olímpico portugués. 

Hoy en día, el hotel pone a nuestra disposición 154 habitaciones perfectamente equipadas para hacer que nuestro descanso y comodidad sean absolutas, con un diseño excelente, moderno y actual. El hotel hoy está completamente renovado, y en él los colores alegres se conjugan con un suelo de madera de roble. 

Todas las habitaciones del Dom José Beach Hotel están totalmente equipadas con aire acondicionado, grandes pantallas de televisión, conexión a Internet de alta velocidad, teléfono, caja de seguridad electrónica, minibar de pago, baño privado y secador de pelo para que no echemos nada en falta. 

Además, podremos disfrutar de una amplia variedad de servicios para el huésped.

El Dom José Beach Hotel se ubica en costa del Algarve. Es muy fácil llegar al hotel, que se encuentra en la Avenida Infante Sagres, 143, 8125-157 en el distrito de Quarteira

Se trata de un lugar fácilmente accesible y bien comunicado, apenas a 20 minutos de distancia del Aeropuerto Internacional de Faro, y a 5 minutos de Vilamoura. Además, está justamente en la playa, sobre la arena, con lo que para poder disfrutar del sol y el océano solamente tenemos que salir de él. 

Solamente a 300 metros encontramos la estación de autobuses más cercana, y se encuentra a 8 km de Vale do Lobo.

Ruinas romanas de Cerro da Vila

Las ruinas romanas de Cerro da Vila están a poco más de dos kilómetros de donde estamos alojados. Fueron encontradas en una zona que era semi- rural del distrito de Quarteira, y son restos de una villa romana que tenía dos residencias, baños públicos, presas y un par de estaciones de salazones. De todas las dependencias, lo único que se conserva son restos de muros, entre los que se encuentran el atrio, el tablinum y el impluvium. 

Sí se pueden ver frisos de mármol y fragmentos de estuco pintado en las paredes, también restos de mosaicos. Aquí podemos ver de igual modo tanques para la salazón del pescado y la necrópolis, que fue más tardía. 

Parque acuático AquaShow

El AquaShow es el mejor parque acuático del Algarve portugués. Se divide en dos tipos de atracciones: temáticas y de agua. En la zona temática encontramos atracciones como la montaña rusa o incluso un lugar donde se hacen espectáculos con animales, y si nos apetece hacer un alto, podemos comer algo en esta zona. Si lo preferimos, podemos hacer uso de sus quioscos. 

En la zona del parque acuático, las opciones de atracciones son muy variadas. Podemos usar las piscinas, los toboganes y los tubos, aptos para todos los públicos. Además, también podemos encontrar zonas de descanso con tumbonas, chiringuitos y quioscos donde tomar un refrigerio o donde sentarnos y sacar la comida que hemos traído nosotros. 

Por la gran variedad de posibilidades que pone a disposición de los usuarios, el complejo AquaShow es una de las mejores opciones para pasar un día divertido con toda la familia en Quarteira, y es muy fácil llegar hasta él desde el Dom José Beach Hotel. Sin duda, merece la pena probar la experiencia.