Hotel Vila Gale Albacora

Localizado en un enclave de ensueño, el hotel Vila Gale Albacora de Tavira es uno de los recintos mejor valorados del Algarve portugués. A tan solo 400 metros de la playa, a la que se llega en apenas cinco minutos, se encuentra en pleno corazón del Parque Natural del Río Formosa. La relajación y el confort están garantizados, y es por ello por lo que los huéspedes lo eligen, alejado de grandes poblaciones y ruidos molestos. Para los que quieran interrumpir su relajación total para disfrutar de la gastronomía o de la fiesta del Algarve, el hotel se sitúa a solo 4 kilómetros del centro de Tavira, donde encontraremos numerosos restaurantes locales, espacios de cultura, discotecas y tiendas exclusivas.

El hotel Vila Gale Albacora, antaño sede de un mercado de pescado especializado en el atún, ofrece dentro de sus propias instalaciones todo lo necesario para el disfrute de sus visitantes, con independencia de sus gustos, procedencia o edad. Desde habitaciones con un diseño clásico y cuidado, donde es protagonista la madera color ébano en los muebles y el mármol blanco veteado en e baño, pasando por dos piscinas exteriores con solárium y hamacas, hasta una piscina climatizada interior. Para aquellos que acudan a Tavira por motivos laborales, el hotel pone a su disposición varias salas de reuniones y conferencias de diferentes tamaños.

Dentro de la oferta de relax, el hotel dispone también de restaurante, zona infantil de juegos e, incluso, jacuzzi y un completo gimnasio de uso libre, perfecto para complementar una larga jornada en las playas de arena dorada del Algarve. El sonido del mar, que llegará sin filtros a los oídos de los huéspedes, conquista a propios y ajenos y garantiza un descanso difícil de igualar, gracias a su disposición única en la desembocadura del río Gilao en el Atlántico.

En la calle Quatro Aguas sin número del municipio de Tavira, en la Costa del Algarve portugués, se encuentra el resort del hotel Vila Gale Albacora. Esta disposición idílica, alejada de grandes poblaciones y a solo 400 metros de la playa Dos Tesos o la playa Do Forte Da Barra, convierte al hotel en la mejor opción disponible para relajarse en cualquier estación del año.

Su enclave en la desembocadura del río Giläo le permite disfrutar tanto de playas de agua dulce como salada. Hace unas décadas, el complejo del hotel era un mercado de pescado especializado en Atún del Atlántico. Junto a esta desembocadura encontramos también la playa Da Ilha de Tavira, junto al Parque de Campismo de la isla de Tavira.

A tan solo 4 kilómetros se encuentra el núcleo urbano de Tavira, lleno de restaurantes, tiendas de ropa y souvenirs, discotecas, bares y opciones culturales, como el Ponte Romana, el Mercado Municipal, el Castelo de Tavira o el Centro de Ciencia Viva de Tavira.

Castelo de Tavira

El castillo de Tavira data de la época medieval y es uno de los más antiguos del distrito de Faro y de todo Portugal. Debido a la buena localización geográfica de Tavira, se encontraron muros en el castillo que databan de la época fenicia, en el siglo VIII a.C.

Pasó después por influencia romana (cuya influencia sigue presente en el puente que cruza el río) e islámica, hasta el momento de la reconquista romana de la Península Ibérica. Es en esta época, en los siglos VI y VII, cuando se constituyen los muros definitivos del castillo y del municipio de Tavira. El castillo es protagonista de numerosas leyendas de moros y cristianos, coincidiendo la mayoría con la noche de San Juan, apareciendo en ellas presos, doncellas encerradas y caballeros cristianos encandilados por la belleza del complejo, todo ello envuelto en un halo de misterio.

Isla de Tavira

Conocida como Ilha da Tavira, se sitúa al sur del municipio. La desembocadura del rio Giläo forma canales y esteros, siendo la isla de Tavira un enclave idílico para el descanso, gracias a sus playas de arena dorada. También es un buen lugar para observar una gran variedad de especies de ave, así como una frondosa flora que ha convertido a una de sus playas, la playa de Barril, en uno de los lugares preferidos para el nudismo y el naturismo, gracias a su discreción.