Este cautivador hotel está situado en el tranquilo y pequeño pueblo de Kyle of Lochalsh, en la costa occidental de Escocia. Este entorno privilegiado destaca por su ubicación, frente al hermoso lago Alsh y se puede acceder fácilmente al pueblo de Kyleakin, en la popular isla de Skye, cruzando un puente. Los huéspedes encontrarán la estación de tren a solo 300 metros y la impresionante ciudad de Inverness a unos 125 kilómetros. Todas sus habitaciones cuentan con un aspecto tradicional a la par que alegre, además de numerosas prestaciones para disfrutar de una cómoda estancia. Los que viajen por negocios agradecerán la presencia de instalaciones de congresos y restaurantes, que sirven tradicionales y deliciosos platos británicos. Por otra parte, los amantes del deporte pueden disfrutar de las cercanas montañas y practicar senderismo, o bien acudir a la costa y realizar deportes acuáticos.