El hotel López de Haro de Bilbao se renovó de forma completa en 2007. Se encuentra en un edificio de cuatro plantas que ofrece cincuenta y tres habitaciones, entre las que se puede disfrutar de cuatro suites. El hall de entrada es uno de los puntos más atractivos del edificio gracias a su elegancia y a su decoración.
El establecimiento se caracteriza por ser un hotel boutique en el que la atención al cliente es uno de sus grandes atractivos. El personal del hotel suele ser previsor y logra ofrecerte todo tipo de soluciones ante cualquier tipo de problema que pudieras tener como cliente.
Por su ubicación, idónea, es uno de los hoteles mejor valorados de Bilbao. Incluso se afirma que Frank Gehry, diseñador del Guggenheim, se hospedó en este lugar y comenzó a darle forma a los primeros bocetos del hoy imprescindible museo, que sigue siendo uno de los puntos turísticos más conocidos de la ciudad.
Los servicios que se ofrecen en el López de Haro están a la altura de su historia. A pesar de su aparente sobriedad, la dirección hace un enorme esfuerzo por conseguir que cada huésped logre relajarse, descansar, comer bien y disfrutar de Bilbao a lo grande.
Sus empleados serán los mejores guías turísticos que podrá encontrar en toda la ciudad. El poder descansar en pleno centro de forma adecuada, así como el tener la garantía de una satisfacción total con los servicios que se ponen a tu alcance, son los dos pilares fundamentales del éxito de un establecimiento que sigue cosechando comentarios muy positivos por parte de viajeros de distintos países del mundo. Este reconocimiento público es la mejor tarjeta de presentación de un hotel completo que hace un ímprobo trabajo por lograr que cada cliente se marche con la clara intención de regresar.