Hotel Monarque El Rodeo

El hotel Monarque El Rodeo de Marbella se encuentra en pleno centro de la ciudad malagueña, por lo que sus clientes pueden gozar de una situación excelente para visitar la zona, cercana a cientos de comercios de todo tipo y perfectamente conectada. 

Los huéspedes de este establecimiento de 4 estrellas se alojan en una zona privilegiada, cercana al Parque de la Alameda por un lado y al casco antiguo de Marbella por el otro, donde un breve paseo permite descubrir numerosos puntos turísticos conocidos de referencia, que uno no puede perderse en su visita a esta ciudad.

El hotel cuenta con un total de 100 habitaciones, de las cuales 10 son individuales y 90 son dobles. Están distribuidas en las siete plantas del edificio, que fue construido en 1976 y renovado en 1997.

Las reservas pueden incluir, a distintos precios, desayuno, media pensión o pensión completa, a elección del cliente según sus propias preferencias. Las habitaciones incluyen aire acondicionado, calefacción, caja de seguridad, fax, minibar, televisión de pantalla plana y por satélite, conexión wifi a Internet gratuita y servicio médico. También tienen secador y algunos artículos de baño básicos para la higiene personal de los huéspedes. El establecimiento dispone de aparcamiento para los clientes. 

Además, el Monarque El Rodeo tiene una terraza en su azotea, sobre un edificio de 7 plantas, desde la que los más curiosos pueden disfrutar del cálido sol mediterráneo y contemplar las vistas de la ciudad de Marbella desde lo alto. 

La entrada al hotel se efectúa a partir de las 15:00 horas, y la salida debe llevarse a cabo antes de las 12:00 horas. Se admiten niños y los menores de 12 años pueden alojarse gratuitamente en una cama adicional. También existe la posibilidad, bajo petición previa, de instalar una cuna en la habitación. Las mascotas no están permitidas. 

Monarque El Rodeo se encuentra en la calle Víctor Serna s/n, a unos 45 kilómetros del Aeropuerto de Málaga, en la Costa del Sol, y en pleno centro de la ciudad de Marbella. Es decir, a pocos metros de los lugares más simbólicos y monumentales de la célebre ciudad vacacional, en la que brilla el sol, de media, unos 320 días al año.

Por tanto, llegar al hotel Monarque El Rodeo es muy fácil, y salir a pasear también, debido a la proximidad de todo tipo de atracciones turísticas: restaurantes mediterráneos, monumentos históricos, museos, la playa o las tiendas.

 Puerto Banús

Marbella es mundialmente conocida por su lado chic, una vertiente que atrae a muchos turistas. Si la idea es vernos rodeados del lujo más espléndido y espectacular, Puerto Banús es una buena opción, ya que se trata de uno de los puertos deportivos más lujosos del mundo. Fue promovido por José Banús, razón por la que se le dio su nombre, y a su inauguración en 1970 acudieron Juan Carlos I de Borbón y Sofía de Grecia.

Puerto Banús es visitado por cerca de 5 millones de personas cada año, dado que es una oportunidad perfecta para observar deslumbrantes yates atracados y firmas de moda de gran lujo como Versace, Gucci o Louis Vuitton.

Los amantes del arte podrán deleitarse con la escultura de Salvador Dalí ubicada en una de las rotondas de la zona. Data del año 1956, se llama Rinoceronte, pesa 3 toneladas y viste un vestido con puntillas

Playa de la Venus

La playa de la Venus ocupa unos 400 metros del paseo marítimo de Marbella. Su situación excepcionalmente céntrica asegura mucha vida y ambiente en la playa y en el paseo. Los restaurantes del paseo brindan la oportunidad perfecta de descubrir la gastronomía andaluza con vistas al mar.

Esta playa se encuentra entre dos puertos deportivos, el Puerto Deportivo de Marbella y el Puerto Deportivo Marina - La Bajadilla, antiguamente el puerto pesquero de la ciudad. 

No se trata de una simple playa, sino que ofrece diversas posibilidades para disfrutar del día. Este es el caso del parque infantil en el que los niños pueden pasarlo bien, las tumbonas en las que acostarse a tomar el sol y las sombrillas bajo las que refugiarse de él, la réplica de un elefante a tamaño real que sirve de ducha a los bañistas o la tienda de masajes.