En medio de la fértil cuenca del Ebro y delante de las montañas de Beceite, este hotel histórico domina la parte alta del pueblo en un paisaje que combina la monumental belleza del pueblo con los lugares de interés que brindan los diferentes enclaves naturales de la zona. Abderramán III decidió construir este castillo, que alberga hoy un hotel de 72 habitaciones, junto a 4 espléndidos ventanales del arte gótico catalán. En sus interiores predomina una decoración de estilo cristiano y majestuoso, con mobiliario clásico y vigas de madera. Está totalmente climatizado y dispone de vestíbulo con servicio 24 horas de recepción y de salida, cambio de divisas y ascensor. Las paredes del hotel están adornadas con motivos árabes y los ventanales góticos del comedor son dignos de ver. Junto al comedor hay cafetería, restaurante, sala de TV y salas de conferencias. Dispone de conexión a Internet y de zona de juegos para niños. También tiene a su disposición el servicio de habitaciones y de lavandería, así como aparcamientos privados, uno al aire libre y otro cubierto.
El hotel está construido en un castillo que domina el casco viejo de la ciudad de Tortosa. El centro de Tortosa se encuentra a 500 m del hotel, mientras que Tortosa está a 15 km de la salida de la autopista AP7 y a unos 90 km de Tarragona, la capital provincial. Los aeropuerto de Reus y Barcelona quedan a 90 y 180 km respectivamente.
Se sirve un desayuno continental o de bufet, mientras que la comida y la cena se pueden pedir de menú o a la carta. Algunos de los platos disponibles son: 'anguila en suc' (anguila en su jugo), 'suquet de peix' (pescado en salsa), 'pastisets' (empanadillas), 'garrofetas' (postre) y platos de arroz. Desde 2012, en las localidades de Cataluña se aplica un nuevo impuesto a los visitantes, que deberá pagarse DIRECTAMENTE en el hotel.
