El hotel Saratoga se encuentra situado en el Paseo Mallorca número 6, 07012 de Palma de Mallorca. La ciudad ofrece una amplia y variada oferta de ocio y cultural que permite disfrutar de su patrimonio de forma sencilla y sin temor a aglomeraciones de turistas, poco recomendables para conseguir este objetivo.
Palma de Mallorca
Justo saliendo del hotel podrás visitar el Museo Es Baluard. A pocos metros está el centro comercial Jaume I, por lo que no tendrás que caminar mucho para conocer la oferta comercial de la ciudad. A 300 metros hay un parada de transporte público que te llevará a cualquier punto de la ciudad. En ella no has de dejar de visitar su impresionante catedral, el Hort del Rei, el mercado central y el museo de la fundación Juan March.
Conocer la gastronomía mallorquina es otro de los requisitos indispensables para completar tu viaje. Este tipo de cocina presenta un perfecto equilibrio entre el uso del pescado y de la carne. Sorprende el manejo del marisco y un amplio surtido de embutidos. Los postres merecen toda tu atención. Palma es una ciudad acogedora, que sigue teniendo espacios llenos de tranquilidad y que permite disfrutar de su belleza. Descubre sus rincones y secretos a medida que paseas por su centro histórico, por el puerto deportivo o por cualquier otra zona de tan bella ciudad mediterránea.
Manacor
Esta ciudad cercana a Palma es famosa por sus perlas, pero también tiene un patrimonio digno de conocer. La parroquia de Nuestra Señora de los Dolores, la iglesia de San Vicente Ferrer, la torre de Ses Puntes y la plaza Sa Bassa son solo algunos de los puntos estratégicos que merecen toda tu atención.
Por su diseño urbanístico resulta muy sencillo encontrar una plaza para sentarse a comer y a degustar su excelente repostería. El pastís de pobre o los suspiros, similares a los bizcochos, son tan deliciosos como necesarios para volver a esa gastronomía más básica y tradicional. Los parajes naturales que rodean la ciudad y la amabilidad de los lugareños son básicas para convertir esta excursión en inolvidable. No te olvides de pasar por las tiendas que venden sus clásicas perlas y de observar por qué son tan famosas.
En el hotel Saratoga recibirás información también sobre cómo acceder a Manacor, ya sea en transporte privado o público. La ciudad se encuentra a unos 60 kilómetros del hotel, al este de la isla.
El hotel Saratoga se encuentra situado en el Paseo Mallorca número 6, 07012 de Palma de Mallorca. La ciudad ofrece una amplia y variada oferta de ocio y cultural que permite disfrutar de su patrimonio de forma sencilla y sin temor a aglomeraciones de turistas, poco recomendables para conseguir este objetivo.
Palma de Mallorca
Justo saliendo del hotel podrás visitar el Museo Es Baluard. A pocos metros está el centro comercial Jaume I, por lo que no tendrás que caminar mucho para conocer la oferta comercial de la ciudad. A 300 metros hay un parada de transporte público que te llevará a cualquier punto de la ciudad. En ella no has de dejar de visitar su impresionante catedral, el Hort del Rei, el mercado central y el museo de la fundación Juan March.
Conocer la gastronomía mallorquina es otro de los requisitos indispensables para completar tu viaje. Este tipo de cocina presenta un perfecto equilibrio entre el uso del pescado y de la carne. Sorprende el manejo del marisco y un amplio surtido de embutidos. Los postres merecen toda tu atención. Palma es una ciudad acogedora, que sigue teniendo espacios llenos de tranquilidad y que permite disfrutar de su belleza. Descubre sus rincones y secretos a medida que paseas por su centro histórico, por el puerto deportivo o por cualquier otra zona de tan bella ciudad mediterránea.
Manacor
Esta ciudad cercana a Palma es famosa por sus perlas, pero también tiene un patrimonio digno de conocer. La parroquia de Nuestra Señora de los Dolores, la iglesia de San Vicente Ferrer, la torre de Ses Puntes y la plaza Sa Bassa son solo algunos de los puntos estratégicos que merecen toda tu atención.
Por su diseño urbanístico resulta muy sencillo encontrar una plaza para sentarse a comer y a degustar su excelente repostería. El pastís de pobre o los suspiros, similares a los bizcochos, son tan deliciosos como necesarios para volver a esa gastronomía más básica y tradicional. Los parajes naturales que rodean la ciudad y la amabilidad de los lugareños son básicas para convertir esta excursión en inolvidable. No te olvides de pasar por las tiendas que venden sus clásicas...
